Aunque hay muchos factores complejos que hace a una inversión inmobiliaria exitosa y rentable, quienes ganan dinero en el sector inmobiliario lo hacen principalmente con alguna de estas formas:
A través de flujos de fondos
Una propiedad inmobiliaria puede producir ingresos por el alquiler que sus inquilinos pagan. Tanto si se trata de un departamento de una habitación, un edificio de oficinas o un centro comercial, al final del día la propiedad genera principalmente los ingresos por el alquiler de su espacio.
El dueño de la propiedad debe también pagar los gastos para administrar esta propiedad como los impuestos de propiedad, que se deducen de los ingresos de alquiler para producir entonces el ingreso anual neto o flujo de caja a los inversores.
A través de la apreciación del mismo
Toda propiedad tiene un valor intrínseco, como la comida o los metales preciosos. La gente tiene que vivir, trabajar y comprar en alguna parte. Sin embargo, hay una cantidad limitada de bienes.
También dependen no solo de la cantidad sino también, en el caso de las propiedades, de su ubicación. Buenos Aires tienen más personas que compiten por el espacio que en el sur del país, por ejemplo. Como todas las cosas, el precio es un reflejo de la oferta y la demanda.
En el mundo de los inmuebles, si la demanda de espacio supera a la oferta esto se traduce en la apreciación de los activos. En otras palabras, el valor aumenta, a pesar de que no puede haber habido un cambio evidente en la propiedad física o de su cantidad de flujo de caja.
Como dueño de esa propiedad el mayor valor podrás capturarlo con un alquiler más alto o una venta a futuro a un precio más alto.
De esa manera vos podrás ser capaz de extraer el valor creado a través de la apreciación. Del mismo modo, la propiedad puede caer de precio si la demanda cae o aumenta la oferta. Los precios inmobiliarios pueden ser volátiles a medida que cambian los mercados.
Edificios de reciente desarrollo, la expansión del gobierno, el crecimiento de la delincuencia en algunas zonas, la recesión, los cambios culturales y tecnológicos, y los cambios demográficos afectan la oferta y la demanda de bienes raíces.
A través del desarrollo de tierras
El desarrollo es el negocio de la mejora de bienes inmuebles a través del proceso de construcción, renovación y su posterior alquiler o venta. Así como con la producción de un coche o una TV, las materias primas y mano de obra se combinan y se financian para crear un todo más valioso que la suma de sus partes.
En general, la tierra con un edificio terminado en ella vale más que la tierra misma. Un edificio ocupado por un inquilino de alquiler pagando vale la pena más que un edificio vacío.
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